LA CAÍDA DE ÍCARO

El cuadro que voy a describir representa la caída de Ícaro. El autor que lo hizo se llamaba Pieter Brueghel el Viejo. El estilo es renacentista (1554). Está elaborado con óleo sobre lienzo y se encuentra en El Museo del Prado (Madrid).

Este bonito cuadro está basado en una historia mitológica. Aparecen en el cuadro dos personajes llamados Dédalo e Ícaro. Ícaro era un joven de 12 años, travieso y atrevido, de pelo rizado y una sonrisa pícara y tenía un carácter tan alegre que la gente de Cnosos lo adoraba. Los personajes vuelan sobre el mar mientras que a Ícaro se le derriten las “alas” y se cae al mar. Apenas hablan entre ellos mientras vuelan para concentrarse en no caerse pero, aunque Dédalo se lo advierte Ícaro, sube muy arriba... tanto que se le derritieron las “alas’’ (construidas por ellos mismos) y cae al mar.

A la izquierda de la imagen está Dédalo con su cuerpo desnudo pero con sus grandes y blancas alas abiertas; en cambio, a la derecha está Ícaro con su roja tela atada a la cintura y sus “alas’’ ya derretidas debido al caluroso sol. ¡Su caída es inevitable!

En el cuadro predominan los colores luminosos y alegres. La luz de la pintura es natural; las figuras representadas son muy realistas y el contorno de los personajes está bastante marcado.

A mi me parece un cuadro muy bonito y su historia también lo es. Me ha gustado mucho describirlo. Este cuadro me transmite un poco de tensión porque Ícaro se está cayendo al mar pero a la vez me transmite libertad porque están volando. 

¡Me ha gustado mucho! 

M.G.H.